En los últimos años, estamos asistiendo a un auténtico boom de la nutricosmética o, lo que es lo mismo, cuidarnos desde dentro con la ayuda de una simple pastillita, en la cual se concentran toda una serie de nutrientes, vitaminas, minerales … extraídos de la naturaleza, para conseguir belleza, salud y bienestar en general. En España, el 28 % de la población consume algún complemento alimenticio, mientras que en Estados Unidos, donde se vive una verdadera fiebre por estos productos, la mitad de la población es consumidor de estos complementos nutricionales.

Aunque complementos nutricionales los hay para todas las necesidades, yo me voy a centrar en la nutricosmética, es decir, en esos complementos que solemos utilizar para mejorar nuestra imagen, desde el punto de vista estético. Qué duda cabe que belleza y salud van de la mano. Un cuerpo sano es un cuerpo bello. Nuestro cuerpo es el reflejo de nuestro interior, con lo cual tiene bastante sentido el hecho de cuidarnos desde dentro para mantenernos sanos y guapos. Es por ello que cada vez más personas se apuntan al consumo de nutricosmética. Y es que, con un simple comprimido, podemos obtener los nutrientes que nuestra dieta necesita y de los que a veces, ya sea por nuestro ritmo de vida u otros factores, podemos carecer.

Los nutricosméticos más consumidos en España son:

– En primer lugar, los anticelulíticos.

– La caída del cabello, que preocupa, y mucho, tanto a hombres y mujeres.

– Los complementos destinados a conseguir un bronceado seguro.

Si entramos a especificar un poquito más sobre los principios activos más utilizados en nutricosmética, los antioxidantes ocupan un lugar de honor en mis preferencias. Activos como las imprescindibles vitamina A, vitamina C y E, así como los polifenoles, ayudan a retrasar el envejecimiento de los tejidos. Por otra parte, el ácido hialurónico, extraído del pescado, o el colágeno hidrolizado, mantienen la piel tersa, minimizan las arrugas, nutren y regeneran los tejidos y mantienen flexibles y lubricadas las articulaciones. Estos ingredientes ocupan los primeros puestos en mi particular ranquing antiedad, ya que estos grupos de activos pueden hacer mucho por nuestro organismo y por nuestra imagen, a medida que pasan los años. La lista de ingredientes no queda ahí, sino que es interminable: vitaminas D, K, betacarotenos, ácidos grasos omega 3 y 6, ácido fólico, biotina, cistina, isoflavonas de soja…

El futuro, en cuanto a tratamientos antiedad se refiere, indudablemente pasa por la combinación de cuidados desde el interior y desde el exterior. Se trata de complementar la aplicación de cremas y otros productos por vía tópica, que ayudan a proteger nuestra piel de causas externas (contaminación, radiación, frío, viento …) con determinados nutricosméticos, cuyos principios activos pasan a través de la sangre, actuando en el lugar donde la célula lo necesita.

Los nutricosméticos deben consumirse siempre durante o después de las comidas, ya que así el organismo los asimila mejor. Respecto all tiempo de tomarlos, no hay límite de tiempo para consumirlo, y se recomienda un mínimo de tres meses para ver resultados.