PREMIUM ELIXIR. ACEITE ANTIEDAD GLOBAL QUE NUTRE Y TRATA LAS MANCHAS
El mercado de los aceites faciales no para de reclutar incondicionales en los últimos tiempos. Este hecho no se les ha escapado a los distintos laboratorios, que se han apresurado a sacar lo que ellos llaman elixires, enfocados principalmente a nutrir en profundidad las pieles más castigadas o envejecidas.
Lierac ha ampliado la familia Premium, la más glamourosa y selectiva de la casa francesa, con Premium Elixir. Un aceite antiedad global, que ofrece un plus sobre otros aceites faciales del mercado. Y es que Premium Elixir, además de nutrir en profundidad, actúa sobre las manchas, corrigiendo las irregularidades del tono cutáneo. Una vez más, Lierac apuesta por la cosmética de hibridación, aunando ciencia y naturaleza en este producto. Gracias a un complejo reparador celular, dosificado al 3%, inhibe la alfa-MSH, hormona estimulante de los melanocitos y TYRP-1, proteína con un papel fundamental en la síntesis de melanina, regulando la pigmentación. Este complejo antiedad repara también el ADN celular, estimulando la sirtuina 6, una proteína que se encarga de reparar el daño celular.
En cuanto al aspecto, digamos, más natural, este elixir, de delicioso perfume floral, lleva un complejo de aceites de sésamo, argón y almendra dulce, dosificados al 20% que, junto con un 10% de óleo-activos de flores negras raras, como la orquídea, amapola y rosa, sello de la línea Premium, aporta omega 3, 6 y 9, nutrientes esenciales para nuestra piel. Esta acción conlleva la reconstrucción del cemento intercelular, algo de lo que a buen seguro habréis oído hablar en los tratamientos antiedad más punteros.
¿Resultado? piel nutrida y luminosa, arrugas menos profundas, aumento de la densidad de la dermis y manchas atenuadas. Ahí es nada. Si a todo ello añadimos una excelente textura, una micro-emulsión que deja un acabado aterciopelado, nada graso, no comedogénico, conseguimos un producto apto para todo tipo de pieles, incluso una piel mixta con tendencia grasa como la mía, poco dada a los aceites en el rostro.
