Sentía enorme curiosidad por probar un acondicionador corporal, es decir, un producto que hidrate la piel de forma intensa del mismo modo que hacemos con el cabello tras el uso del champú. Nivea ha sido la pionera en este sentido, cosechando un enorme éxito. Por este motivo, el grupo Beiersdorf se ha decidido a lanzar al mercado su versión en farmacia, de la mano de Eucerín. Ello supone un producto avalado por mayores estudios sanitarios, indicado para las pieles más sensibles, sin perfume, ni emulgentes ni conservantes – el de Nivea está libre de colorantes y siliconas, pero no de parabenes y otros conservantes, así como perfume.
Se trata de una loción corporal, cuya principal diferencia con otros productos similares radica en que se aplica sobre la piel húmeda, tras el gel de ducha, procediendo, seguidamente, al aclarado y secado. Su innovadora fórmula contiene un 5% de Dexpanthenol, derivado de la vitamina B5, que actúa como hidratante, reduciendo la pérdida de agua, reforzando la función barrera de la piel y estimulando la regeneración de la misma. Por otra parte, la tecnología de Hidrodispersión, especialmente para su uso directamente en la ducha, hidrata al instante, formando una película protectora en la piel, y sin dejar sensación pegajosa tras su aplicación.
Pues bien, tras unos días de uso del acondicionador corporal Bajo la Ducha, he de decir que mi impresión no puede ser mejor, tanto desde el punto de vista de la innovación, como de la eficacia. En estos tiempos en la que la mayoría de nosotros vamos de bólido, destacaría la comodidad que supone hidratar la piel de forma inmediata bajo la ducha, sin tener que aplicar, posteriormente un hidratante corporal y tener que esperar a que se absorba para poder vestirse. Muchas personas son conscientes de que deberían hidratar su piel diariamente tras la ducha, pero no lo hacen o solo lo hacen de forma ocasional, por la falta de tiempo o, simplemente, por pereza. En este sentido, me parece una opción interesantísima para los deportistas, que se duchan con frecuencia, pudiendo irritar su piel, que consiguen un cuidado adecuado en un gesto rápido. También me parece un producto muy interesante tanto para niños, como para hombres, a los que no les suele gustar la sensación pegajosa que dejan en la piel las lociones corporales. Mi sensación, tras su uso, fue de mucha hidratación y piel confortable, sin efecto grasiento en la piel. Si a ello le unimos una excelente tolerancia cutánea, incluso en las pieles más sensibles y problemáticas, pues ahí tenemos un producto diez.